Es un sentimiento compartido dentro de Cataluña. En aquella tierra se ama mucho a la región y un claro ejemplo de ello es la repercusión del último trabajo de un extremeño y también catalán, el cantautorCipriano Vega. Nació un frío enero en la localidad pacense de Zahínos y en una cálida primavera de nueve años más tarde se trasladó con su familia a Barcelona.
Desde allí ha cantado mucho a Extremadura, con temas como Qué bonito es Badajoz , Echo de menos mi tierra , Cáceres y Badajoz o El rociero extremeño , y sigue haciéndolo. El éxito de sus letras es compartido por los inmigrantes extremeños que recuerdan con sus canciones la región que les vio nacer.
Cipriano acaba de publicar su último trabajo discográfico, que ha realizado junto a su hija Maribel Vega, después de grabar una quincena de discos como integrante del grupo Alma Flamenca y otros tres con Alborada Flamenca, en los que siempre había algún tema para su Extremadura querida.
Pero sin olvidar sus raíces, Cipriano siempre vuelve a renacer. Hace un años dos de los componentes de esta última formación –andaluces– se desligaron del grupo musical y él y su hija, de 28 años de edad, decidieron mantenerse a flote en esto de la música con el mismo nombre. Ahora ve la luz el primer disco de padre e hija, titulado Nuevo sendero , con el que esperan deleitar al público no solo en Cataluña, sino también en Extremadura, y que todos los extremeños encuentren un refugio en su música estén donde estén.
“Hace muchos años que dejé Extremadura pero siento añoranza de mi pueblo, de su gente y mis amigos. A esa añoranza y a tanto recuerdos, le ponemos letra y música para poder transmitir nuestro sentimiento por la tierra que me vio nacer”, comenta el cantautor extremeño. No es el caso de su hija Maribel, nacida en Hospitalet de Llobregat en el año 1983. “Yo soy catalana y esta es mi tierra, pero he pasado todos los veranos de mi niñez en Zahínos. De allí también tengo muchos recuerdos y amigos y por eso le canto a Extremadura porque aunque quiero a Cataluña, también considero Extremadura tierra mía”, apunta la artista.
En 20 años de dedicación, Cipriano ha grabado un disco al año y ha cantado incluso en castúo, sobre todo con el segundo grupo que formó tras la desaparición de Alma Flamenca. Con su segunda formación ha grabado los discos titulados Echo de menos mi tierra , Vuelvo a tí –que incluye un tema sobre el Club de Fútbol Extremadura– y Añoranza , dedicados a la región y a sus emigrantes. La agrupación ha ido perdiendo miembros, pero Cipriano y Maribel seguirán cantando a su tierra. Ya piensan en el nuevo disco que grabarán este año y con el que no les faltará el cariño de los extremeños.